Fuerza del Pueblo denuncia crisis en SENASA; director defiende gestión con cifras de inversión
| Podliticast
Santo Domingo, R.D. – El Seguro Nacional de Salud (SENASA) se encuentra en el centro de una controversia política y administrativa, luego de que altos dirigentes del partido Fuerza del Pueblo denunciaran una supuesta crisis financiera y de gobernanza en la entidad.
En una rueda de prensa realizada el pasado miércoles, los doctores Ramón Alvarado y Fernando Caamaño, secretarios de Salud y de Seguridad Social de la Fuerza del Pueblo, acusaron al gobierno de utilizar el SENASA como “instrumento político”, lo que, según afirmaron, ha derivado en un déficit operacional acumulado de 3,372.8 millones de pesos en el régimen subsidiado.
Los dirigentes señalaron además que la situación compromete seriamente la calidad de los servicios, citando retrasos en autorizaciones, morosidad en los pagos a prestadores de servicios y un “riesgo real de quiebra” para clínicas y profesionales de la salud que dependen de la aseguradora estatal.
Estas denuncias se producen a pocos días de que el Colegio Médico Dominicano también alzara la voz, reclamando atrasos en los pagos a médicos y centros de salud privados, en lo que calificaron como un deterioro alarmante en la relación financiera con el SENASA.
En respuesta a estas críticas, el director ejecutivo de la aseguradora, Santiago Hazim, defendió la gestión de la entidad mediante una nota institucional. Hazim afirmó que la inversión en servicios de salud se ha incrementado significativamente, pasando de 24,279 millones de pesos en 2019 a 60,274 millones en 2024, lo que representa un aumento del 248 %.
“Este aumento sostenido ha permitido que millones de familias dominicanas accedan de forma oportuna a medicamentos, procedimientos quirúrgicos y estudios especializados”, señaló el comunicado de SENASA.
El intercambio de cifras y acusaciones pone en evidencia la tensión política en torno al sistema de salud pública y a la gestión de una de las instituciones más relevantes del sistema de protección social del país. Mientras la oposición denuncia una supuesta “quiebra técnica”, la administración actual defiende sus logros con datos macroeconómicos.
La ciudadanía, en tanto, observa con preocupación, esperando que las diferencias políticas no sigan afectando la calidad y continuidad de los servicios de salud que, para muchos, representan su única opción de atención médica.
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